El pueblo de Pals, es una parada obligada con la visita de su núcleo monumental. Se trata de un pueblo medieval elevado sobre un cerro que conserva la estructura y el trazado típicos de aquella época. Los callejones estrechos, las torres y los edificios, perfectamente conservados, otorgan a esta villa un interés monumental incuestionable. Un paseo por sus calles empedradas nos transporta a otra época.
En la zona hay otros pueblos medievales con su belleza particular, que se pueden visitar fácilmente desde Pals. No dejen de visitar Peratallada, Ullastret, Monells, Rupià y otros de los alrededores.
Cerca del Aparthotel Arenal encontramos la Torre Mora, un recuerdo de otra época que nos trae recuerdos de antiguos piratas. No olvide visitarla, como tampoco debería olvidar visitar el Pesebre Viviente que se representa durante la época navideña.